lunes, 30 de abril de 2012

La Precariedad


La precariedad y la informalidad tienen un fuerte impacto negativo sobre la salud y la calidad de vida. La tercera consecuencia es empeorar las condiciones de trabajo. La reforma aumenta la flexibilidad interna de las empresas. Es conocido que la inseguridad laboral crónica empeora la salud física y mental y aumenta el número de visitas médicas. La distribución irregular de la jornada de trabajo, en especial el trabajo a turnos o la prolongación de la jornada, aumentan la fatiga, los accidentes, las enfermedades, los trastornos del sueño y la conciliación de la vida familiar. Todo ello aumentará los riesgos laborales, las enfermedades y accidentes de trabajo y el riesgo de muerte prematura. La cuarta consecuencia es reducir la participación en salud laboral. Numerosos estudios muestran la estrecha relación existente entre una mayor participación de los trabajadores (en sus diversas formas de representación y con los delegados de prevención) y un mayor nivel de salud. Debilitar los convenios colectivos y fortalecer los “acuerdos” individuales en las empresas debilita la participación sindical y la posibilidad de reducir los riesgos laborales y aumentar la salud laboral. La quinta consecuencia es fomentar el “presentismo” laboral, es decir, la presencia de trabajadores en sus puestos de trabajo aún y estando enfermos a causa del miedo al despido y la precariedad. El presentismo, más frecuente en colectivos con dificultades para hacer valer sus derechos, ha aumentado en los últimos años en España, lo que conlleva que muchos trabajadores pasan más horas de las establecidas en sus puestos de trabajo. Dado que faltar al trabajo puede suponer ser despedido con más facilidad, ahora el trabajador casi no tendrá ni el derecho a “ponerse enfermo”. Todo ello aumenta el número de errores y riesgos, deteriora la salud y empeora el bienestar y la vida familiar. La última consecuencia será aumentar la pobreza y la desigualdad. El desempleo, la precariedad y la reducción de salarios aumentan el número de “trabajadores pobres” y la desigualdad social. Además, también empeora la situación de quienes trabajan, en quienes aumenta la inseguridad y la presión para aceptar reducir sus salarios. Tanto la pobreza como la desigualdad social son determinantes sociales fundamentales que influyen negativamente en la salud y el aumento de desigualdades en salud.A todo esto nos lleva la nueva reforma laboral.

José María Domínguez

lunes, 2 de abril de 2012

Crisis económica y hegemonía del capitalismo aleman (y III)


La UE desde sus inicios fue un Bloque económico regional, que el capitalismo europeo necesitaba para hacer pagar la crisis a los trabajadores. Y por otra parte permite a Alemania ejercer el dominio sobre el resto de los países europeos, imponiendo sus condiciones.
Siempre nos vendieron la moto de que la UE iba a ser la solución a todos los problemas, la tierra prometida. La verdad es que después de la década transcurrida desde la llegada del Euro; podemos constatar ya cual era su verdadero objetivo: poner de rodillas al Movimiento Obrero. El Euro ha significado un empobrecimiento de las clases populares. En el caso del Estado español, mientras que los salarios subían un 14%, la cesta de la compra lo hacía un 48% y la vivienda un 66%.
Por otra parte la llegada del Euro se realizón en un momento de euforia capitalista. Ya en aquél momento algunos economistas pensaban que la unificación capitalista sólo serviría para iniciar una lucha por los mercados. Ya en 1998 Alan Woods nos decía que  "lejos de ser un paso en dirección al libre comercio, la UE es, por un lado, un bloque comercial regional contra EEUU y Japón y, por el tro, una alianza de potencias imperialistas dedicadas a la explotación colectiva del Tercer Mundo" [Alan Woods,  Una alternativa socialista a la Unión Europea, Marxismo Hoy nº 4]
Ilusiones capitalistas

El período de los 30 Gloriosos ya no volverá. El Estado de Bienestar ya no es necesario para la burguesía europea y contra más pronto se de cuenta la aristocracia obrera mejor para reconstruir una alternativa obrera. Mejor para dar una alternativa a este sistema capitalista donde sobran los parches reformistas.
Durante toda aquella época un optimismo idealista llenaba las cancillerías europeas. Una ilusión que les llevó a la creación de un Mercado Común; pero era una utopía, una utopía reaccionaria. Son demasiadas las contradicciones existentes entre las distintas potencias europeas. Y esto se vió a partir de la crisis de 1973. Una crisis que permitió realizar un ataque a las condiciones de vida del movimiento obrero. Una crisis en la que ya utilizaron el fetiche de la Austeridad (aceptado por el eurocomunismo y por la socialdemocracia obrera). Aceptación que permitió una salda  "capitalista", descargando su peso en la espalda del Movimiento Obrero y de las clases populares. Salida que permitiría que la burguesía europea alcanzara su  "hegemonía" sobre el proletariado y que incidiera en la lucha de clases, ya que desde entonces el Movimiento Obrero no ha vuelto a alcanzar aquellos niveles de vida y que en las siguientes décadas permitió que la burguesía rebajara derechos: haciendo desaparecer la escala móvil de salarios o el salario mínimo. Hoy encima dicho término (Austeridad) ha transformado nuestra realidad trayendo el paro de masa, la pobreza, la precarización y la exclusión social de amplias masas.
No hay nada nuevo escrito bajo el sol. ¡Ni siquiera el ciclo eterno de las  "ondas largas". Realmente existen tendencias, pero sólo eso:  "lo cierto es que hay períodos definidos en el desarrollo del capitalismo y dada uno de ellos tiende a ser diferente de los demás" [Alan Woods]¿Pero el resultado final depende de la lucha de clases! Y esto es lo que no entienden ni los tecnócratas ni demás economicistas de las distintas escuelas reformistas o centristas.
Los 30 fueron un espejismo. Una excepción, entre otras cosas debido a la existencia de un bloque obrero que con una planificación centralizada y burocratizada tendía a extenderse y que la burguesía necesitaba frena. Por eso mismo pudo existir el pacto keynesiano de postguerra. Pero a partir de la década de los 80 y de los 90 aquél bloque iba a quedar hecho trizas. Y con la caida/derrota del estalinismo la burguesía no necesitaba ya pactos. Lo que verdaderamente necesitaba era poner de rodillas al movimiento obrero. Y esto lo realiza conquistando la hegemonía cultural y más tarde política. Cultural al introducir la ideología del individualismo posesivo, al introducir la competitividad monstruosa entre los trabajadores y al cambiar la ideología. Ya no hablan de fuerza de trabajo, sino que hablan de capital humano. Ya no hablan de Internacionalización del capital, sino que hablan de globalización. El problema es que dicha ideología fue aceptada por la socialdemocracia que se ha transformado en un socialiberalismo; y al mismo tiempo fue aceptada por los PCs  que intentaban ocupar el  "vacío" dejado por la socialdemocracia (el papel desempeñado por el eurocomunismo). Quizás el ejemplo más claro de lo dicho (donde se une lo económico- con los Pactos de la Moncloa- con lo político- una Constiución Monárquica y el Aparato franquista intacto (la imagen fue el primer mitin legal de Carrillo en la Plaza de Toros de Valencia donde colocó al lado de la bandera Obrera la bandera  roja y gualda).......
La derrota del estalinismo supone que la antigua casta burocrática realice una acumulación primitiva del capital, de tipo mafioso. Una acumulación que conlleva una guerra cruel y criminal que desarticuló la Yugoslavia de Tito. Una acumulación que desintegra dos Estados multiculturales como fueron la Unión Soviética y Yugoslavia. Una acumulación que por otra parte ha llevado a una ·tercermundialización" de los países del glacis soviético, y al mismo tiempo nos ha traido de nuevo el racismo, la limpieza étnica, la aparición de movimientos nazi-fascistas y el terrorismo islámico. 
Como decía Trotsky en su Revolución traicionada (1939), el paso de la burocracia con todo su bagaje al capitalismo, creando una nueva burguesía mafiosa ha supuesto una recaída en la Barbarie y en la  "guerra permanente" por la conquista de materias primas y nuevos mercados. Y en última instancia ha conllevado la creación de un nuevo  "ejército de reserva" de millones de personas....
Adios a los Derechos
Europa se ha dividido en dos. Y con el  Pacto del Euro se hablaba de la Europa a  dos velocidades. Después han venido la directiva Bolkenstein (que el no al Referendum había dejado aparcada). Pero para cumplir con sus objetivos la burguesía europea (y en particular la alemana) se ha inventado la crisis de la Deuda. Un método que ya dio sus buenos resultados (para el capitalismo representado por el FMI y la BM) en Latinoamérica con el corralito argentino. Es la política de los  "Ajustes estructurales" que aplicaro más tarde en los paises del Este, en particular en la Rusia de Yeltsi, pero también en los Balcanes o en Chequia.
La Deuda es la trampa económica que impone la burguesía. En el caso de la UE supone el empobrecimiento de los PIIGS (Portugal, Islandia, Italia, Grecia y España). No hay dinero. Es el grito de esta burguesía senil. Y el que tiene  la llave no es otro que el capital alemán que está imponiendo sus condiciones. ¡No hay dinero! no lo hay para los salarios, para mantener nuestro nivel de vida; pero si lo hay para salvar a los bancos (cuando son ellos los que han traido la crisis). ¡No hay dinero!, no lo hay para la sanidad; sin embargo, si lo hay para aumentar el presupuesto militar, si lo hay para el presupuesto de los cuerpos policiale (lo que hizo el gobierno de Rajoy inmediatamente de asumir el poder). ¡No hay dinero!. para la educación pública; pero si lo hay para las compañías farmacéuticas y para apropiarse de las patentes (con lo que estan castigando a los países en desarrollo); pero si lo hay para desviar grandes sumas de dinero a sus amigos de las escuelas religiosas y privadas.....
Pero lo más fundamental es la perdida de los derechos ecoómicos y sociales (aquellos en los que nunca ha creido la burguesía europea). Quieren hacernos volver al siglo XIX, el que relató Victor Hugo en Los MiserableZola en Germinal; por no hablar de la  Historia de dos ciudades  de C. Dikens. El proletariado ha de volver a sus orígenes; a aquél que al entrar en la fábrica (como decía Marx) dejaba de ser ciudadano, para convertirse en cosa, mercancía, propiedad de su patrono.
¡Trabajad, trabajad, malditos!

La ilusión capitalista se ha transformado en un infierno para el proletariado. Ya no es el maquinismo, también descrito por Charlot en  "Tiempos modernos". Ahora mismo es algo más. El capitalismo senil necesit de la desaparición de amplias masas a las que ya no necesita (pues sobran), creen que tienen demasiado ejército de reserva. Y a nivel ecológico esto les permite "arrasar" amplias regiones.
Pero además el trabajo (si es que todavía se le puede llamar así) está siendo reducido a niveles tercermundistas. Se ha producido un abaratamiento de los costes, fundamentalmente de la mercancía fuerza de trabajo. Así la Agenda 2010 en Alemania supuso un recorte del  gasto social y el aumento de la flexibilidad laboral. Este modelo está siendo impuesto en toda Europa. Es lo que supone la Reforma Lboral aprobada por el gobierno de Rajoy, que se ha hecho mediante el chantaje de la competitividad. ¿Pero de qué competitividad hablan? Cuando la mayoría de las multinacionales españolas han dejado ejercido el derecho a deslocalización de sus empresas. Secillamente al chantaje de convertirnos en trabajadores del Tercer Mundo. Es decir el proyecto burgué es el de igualar nuestras condiciones de vida a la de los trabajdores de Países tercermundistas.
Quyieren convertir en modelo los minijobs. Alemania está basando su crecimiento en una mayor explotaciónde la clase trabajdora. El empobrecimiento es total. Actualmente en Alemania existen 8 millones de personas que trabajan por salarios inferiores al umbral de pobreza. Por otra parte, según las últimas reflexiones (del Parlamento Aleman), actualmente una persona que trabaje durante un año en un minijob acumula una pensión mensual de 3'11€; por tanto esto supone que tras 45 años de trabajo tendrá una pensión básica  de 139'95€. Por otro lado, cerca de 7'4 millones de trabajadores cobran 400€ al mes. Y por ello no están obligados a realizar aportaciones a la seguridad social ni a la caja de pensions.
Pero es que, en última instancia, la miseria ya está dentro de nuestros países y ciudades.  Nápoles es una de nuestras ciudades más pobre y donde miles de niños (no es un trozo de Dikens, sino nuestra realidad) dejan el colegio para ayudar a sus padres a llegar a fin de mes. Trabajando en negro o en su lugar captados por la mafia como sicarios. Algunos cobran en negro 1 euro por hora, seis dias a la semana, diez horas aldía, ganando como mucho 50€ a la semana. De nuevo la desaparición de derechos. Según las últimas cifras los niños que han dejado el sistema escolar entre 2005 y 2009 en la región de Nápoles ascienden a 54.000 y de estos niños , el 38% tendría menos de 13. 
Un sistema económico que permite esto es Barbarie y decadencia seni. Y este modelo es el que quieren extender. El que se encuentra en la Reforma Laboral y por lo quera necesario la la resistencia y la lucha que ha comenzado por una Huelga General.
Javier Méndez-Vigo