Rafael Correa Presidente de Ecuador manifestó en la
pasada Cumbre Hispanoamericana, para la Cadena SER “En un anterior de viaje a
España, manifesté que era un gran injusticia la ley hipotecaria española,
cuando regrese a Ecuador uno de mis asesores me comunico que nosotros teníamos la
misma ley que los españoles. Inmediatamente nos pusimos al trabajo y se cambio
la ley hipotecaria, hoy en ecuador existe la dación en pago y los alquileres
sociales. Las leyes cuando se quedan obsoletas hay que cambiarlas”.
Correa ha catalogado la crisis económica en
España como "el peor de los mundos" y advirtió de que miles de
personas se han quedado sin un techo. En este sentido, apuntó que "si una
familia no puede pagar un crédito, es problema para la familia, pero si un millón
de familias no pueden pagar, el problema es para los bancos también". El
presidente de Ecuador llamó a "rebelarse" a quienes sufren la crisis
en España y otros países europeos, para recordar que es la ciudadanía
"quien manda en la sociedad" y no "el capital financiero".
Las familias Ecuatorianas que tienen problemas económicos en España se calcula
que entre 8.000 y 15.000 ecuatorianos no pueden hacer frente a las hipotecas
que contrataron. Quito confía en que parte de este colectivo pueda beneficiarse
de la ley promovida por el Gobierno de Mariano Rajoy y que contempla una
moratoria en los pagos a las familias con menos recursos. A ellos se le dan una
esperanza pero a otros colectivos no les representan nadie o sus gobiernos
pasan de todos ellos.
En nombre de la madre patria que enseñaron a los
latinos-americanos en sus escuelas donde desdibujaron las historias verdaderas
y nobles de nuestros originarios padres
y madres, nuestros ancestros y que nos llenó de virreinatos. El Rey sin reino
que se cae a cada rato ya sin equilibrio de eso que el llama España, que se
desarma, que se rebela y que toma las calles y plazas para reclamar al mundo
ante el castigo ignominioso del capitalismo que ahora exprime a su propio
pueblo para seguirle explotando.
José María Domínguez