jueves, 23 de diciembre de 2021

LA ULTRADERECHA Y LA IGLESIA (1)

 


En la práctica, la alianza entre fundamentalismo cristiano y ultraderecha supone una cruzada contra el feminismo,los movimientos de las disidencias sexuales y sus conquistas presentes, pero también implica un intento de frenar futuros logros” [ Nuria Alabao]


INTRODUCCIÓN


En la izquierda- desde la Teoría Crítica- se ha desarrollado un cierto milenarismo destacando sobre todo el pensador W. Benjamin que introdujo el término del “ángel caído” para explicitar la constante lucha del proletariado. Por su parte Michael Löwy en su obra Cristianismo de Liberación realiza un recorrido por la Teología de la Liberación, desde W. Benjamín hasta nuestros días, pasando por la Filosofía de la Esperanza de E. Bloch. Esa Iglesia que estaba al lado de los pobres y que, desde la perspectiva Latinoamericana, se comprometía con una Ética de la Liberación. Quizás el interés por la Religión de los pobres hay que verla en el mismo Engels, que desde sus comienzos filosóficos se interesó por las formas rebeldes y heréticas de la Religión


De entrada se interesó por el cristianismo primitivo, definido como la religión de los pobres, los desterrados, los malditos, los perseguidos y oprimidos. Los primeros cristianos procedían de los niveles más bajos de la sociedad: esclavos, hombres libres despojados de sus derechos y pequeños campesinos incapacitados a causa de sus ideas”1



Este cristianismo revolucionario es el que se desarrolla en Latinamérica desde la década de los 60 del siglo XX y que influye/ cohabita con el marxismo revolucionario hasta la década de los 80. Un cristianismo que incide en diversos partidos, entre los que cabría destacar el FSLN (en su época revolucionaria y antiimperialista) o en el PT y el MST en Brasil.


Religión y política


Una de las mejores escenas que recuerdo del cine se refiere al final de El Reino de los Cielos En dicha escena Saladin acaba de tomar Jerusalén y cuando realiza la entrada en los aposentos del Rey cristiano se encuentra con una reliquia sagrada del Cristianismo en el suelo de la habitación. La reacción del “conquistador” es sintomática; se para, mira la reliquia, la recoge y con gran respeto la aposenta en la mesa y continúa su rumbo…..


La Religión nunca ha dejado de inmiscuirse en la política, pero eso no es malo (si sirve para salvaguardar los intereses de los creyentes) si no intenta imponer su VERDAD a las demás verdades. El problema surge cuando abandona sus “orígenes” y se convierte en una Institución Política. Lo que se ve en las distintas religiones. Quizás lo que sea necesario es la fundamentalización de una sociología de las religiones que permita sacarnos de un marxismo vulgar, burdo e intolerante que sólo admite que “la religión es el opio del pueblo”; sacando dicha tesis de su contexto y convirtiéndola en un Dogma como lo fue todo el Diamat soviético.


Gilbert Achcar en su libro Marxismo, Orientalismo,cosmopolitismo nos dice que dicha crítica filosófica a la religión parte de Feuerbach y comienza a verse en los Anales Franco-Alemanes particularmente en “Para una crítica de la filosofía del derecho de Hegel, donde aparece el texto marxiano:


La miseria religiosa es a la vez la expresión de la miseria real. La religión es el suspiro de la criatura agobiada, el alma de un mundo sin corazón, el espíritu de un estado de cosas donde no hay espíritu. Es el opio del pueblo”2


¿Qué vergüenza! ¿Qué irracionalidad! Que condujo a la burocracia estalinista a pervertir a Marx y al marxismo. Ahora bien como ésta época era humanista e ideológica dejó de ser una verdad científica para el Diamat soviético. Lo que importaba a dicha burocracia era la imposición de una nueva verdad y todo lo que coincidiera con dicha “ideología humanista” para el estalinismo se convertía en anatema, quizás por eso había que depurar determinadas obras como aquella con la que comienza el “marxismo occidental”: Historia y conciencia de clase. Ya que en dicha obra Lukács coincide plenamente con Marx al hablar de Ideología y Falsa consciencia. Para el marxismo abierto de Lukács y para el mismo Marx la religión asume el papel de una “falsa consciencia”. La religión es una concepción del mundo (es la teoría general de ese mundo). La religión es la expresión que fetichiza la miseria real.


Este marxismo delimita claramente la diferencia entre la Iglesia primitiva/ popular y lo que se ha convertido la religión cuando se transforma en una Institución Política como pueda ser el Estado del Vaticano o las distintas Iglesias Protestantes. ¿Cuál es el origen del cristianismo? ¿Cómo convivian los primeros cristianos? Veamos un párrafo de los Hechos de los Apósteles:


La multitud de los fieles tenía un solo corazón y una sola alma. Nadie consideraba como propios sus bienes, sino que todo lo tenía en común… Entre ellos ninguno sufría necesidad, pues los que poseían campos o casas, los vendían, traían el dinero y lo depositaban a los pies de los apóstoles, que lo repartían según las necesidades de cada uno” [hecho de los Apóstles, 4-32]


El marxismo veía en esto un cierto comunismo primitivo e ingenuo3. El marxismo nunca absolutizó (como hizo el marxismo vulgar) la frase de que la “religión es el opio del pueblo”, todo lo contrario sino que la ve como “una realidad social e histórica” ¿Qué significa estemétodo? Como firma M. Löwy es simplemente abordada como una de “las muchas formas de ideología”. Tan solo habría que releer determinadas obras como la de L. Goldman (El Dios oculto); donde realiza un impresionante estudio del jansenismo. La religión puede desempeñar un papel decisivo en la vida de la humanidad, y es lo que podemos concluir de las obras de Marx y Engels. Sobre todo de este último , en sus estudios sobre la Religión y, en particular, de las rebeliones campesinas como la de Thomas Münzer. Por otra parte, este hilo marxista vuelve a salir a lo largo de siglo XX particularmente en el “romanticismo anticapitalista” de W. Benjamin o el “utopismo de E. Bloch


Las actividades de las distintas Iglesias- como Instituciones sociales- está llena de contradicciones desde que fue reconocida por Constantino hasta nuestros días. No podemos olvidar las distintas “herejías” y misticimos que recorre toda la Edad Media, ni tampoco lo que significó la Reforma para la aparición del capitalismo (como bien fundamentaro Marx o Weber). Sin embargo el mensaje del Nuevo Testamento deja bien patente la crítica a cualquier tipo de riqueza que suponga la existencia de los pobres (volveremos sobre ello más adelante). De ahí las distintas confrontaciones entre el “mensaje de Cristo” y lo que desde la Institución se impone.


Tomemos la época que va desde 1930 a 1950, época donde la prensa española (franquista) solía publicar frecuentemente las fotos de los prelados con el saludo fascista. ¿Cual fue el papel de dicha Institución con respeto al golpe franquista? Fue simplemente la del total apoyo al nuevo régimen. Situación que se reproduce igualmente en la Alemania nazi. El mismo G. Lewy nos lo dice: “Desde el principio hasta el final del gobierno de Hitler, los obispos no se cansaron nunca de aconsejar al fiel que aceptara su gobierno como autoridad legítima a quien se debía rendir obediencia”. Es verdad también que parte de la misma Iglesia estuvo en el otro lado de la barricada (como lo volvería a estarlo en la década de los 70); pero ahora mismo estamos constatando lo que realizó la Institución.


En la España de 1936 la Iglesia -con un sentido plenamente religioso. Y como elemento estratégico se inclinó con los golpistas; dicho movimiento fue iniciado por las milicias nacionales de Navarra. No hay que olvidar que el Himno de los Requetés comienza con la siguiente estrofa: “Por Dios, la Patria y el Rey lucharon nuestros padres…..” Himno que junto al español y al Cara al Sol serían los tres himnos que durante la postguerra cantaríamos casi todos los dias los chavales que hoy pasan de los 60 (nos educaban en los “valores patrios”. Pero es más, la Iglesia acabaría defendiendo que la sublevación era una “Santa Cruzada” contra el comunismo tal y como la calificó el obispo Isidro Gomá


Se trataba claramente de un intercambio de favores: asumir la idea de cruzada a cambio de justificar la sublevación preventiva cuya reconocida falsedad fue asumida por Gomá y, con él, la jerarquía eclesiástica española, para coadyuvar la relación entre el mal y su remedio, prestando a los conspiradores el otro gran mito justificador de los sublevados, el de que habría permitido frenar una supuesta conspiración comunista en ciernes”4


La idea de Cruzada fue usada en primer lugar por arzobispo de Santiago y se fundamentó en la Pastoral Las dos Ciudades (sintomático título que nos recuerda a San Agustín). Se distinguía entre la ciudad terrenal, la de los “sin Dios, y, por otra parte, la ciudad celeste de los hijos de Dios. A partir de aquí se defendía que la guerra que implicaba el golpe de Estado era una “guerra justa” que iba a permitir al bando nacionalista a una recristianización de España (lo que los historiadores terminarían por llamar el nacional-catolicismo).



Con el triunfo de los nacionales la institución Católica salió beneficiada. Angel Luis López nos dice la dos fundamentales: 1) El régimen victorioso restablecía la financiación estatal del culto y el clero que fue suprimida por la 2 República, a cambio los eclesiásticos llegaron a justificar dicha “guerra santa” y silenciaron los encarcelamientos en masa. Todo sea por la defensa de una “justicia divina” de dicha Cruzada. Y 2) La iglesia recuperaba el control social en cuanto a la educación y la moral

Continuará…..

Javier Méndez-Vigo Hernández


1Michael Löwy, Cristianismo de Liberación. Perspectivas marxistas y ecosocialistas. El Viejo Topo, Barcelona 2019, pg., 20

2Gilbert Achcar, Marxismo, orientalismo, cosmopolitismo, Edicions bellaterra, Barcelona 2016 pg., 29

3Alan Woods, El marxismo y la religión, Cuadernos de Formación Marxista nº4. Fundación Federico Engels, Madrid Febrero 2002

4 Angel Luis López Villaverde, Iglesia de la Cruzada. La elaboración del mito de la Cruzada; en Manuel Ortiz Heras y Damián A. González (dir.), De la cruzada al desenganche: la Iglesia española entre el franquismo y la transición, Silex, Madrid 2001, pgs., 21-47


jueves, 11 de noviembre de 2021

CUANDO UN HERMANO SE VA...

 

Comenzaba 1979 y llegaba a Castellón después de pasar 18 meses en la “pequeña legión” cerca de la Cibeles. Joven de 27 años y a punto de terminar la carrera de Filosofía. Eran los años duros de la “transición” venía de pasar la “Operación Galaxia” (el primer intento de Golpe de Tejero). No dejé de militar ni siquiera en la “pequeña legión” en la izquierda, sabiendo lo que significaba en aquellos años hacerlo en la semiclandestinidad de los cuarteles. Se acaba de aprobar nuestra Carta Magna… Con esa mentalidad arriba de nuevo a Castellón en momentos donde FN campaba a sus anchas, y la ultraderecha no había dejado las armas. Lo dicho eran años duros e inclusos sangrientos. Es en aquellos momentos cuando en Marzo de 1979 la Izquierda se reúne en el Centro Excursionista de Castellón. Allí aparecieron Asociaciones de Vecinos (Vicent Grau), independientes como Mingo Llorens, Vicent Pitarch, Falo Menezo y otros que. También aparecieron Partidos como el PSAN (Toni Royo), el POUM (Ricard Colom, Jose M. Dominguez), la LCR (Javier Méndez-Vigo). El objetivo formar una candidatura unitaria de izquierdas. Allí se cedió bastante, en particular los Partidos . Una cosa se tenía clara y era la unidad del movimiento por encima de las siglas y de los personalismo (se estaba construyendo lo que sería uno de los embriones de la futura EUPV). Es en dichas circunstancias en las que conocí a una pareja de la que no me separaría en 42 años, hasta que la pandemia y la enfermedad me los ha arrebatado.

                                                     25 de Abril de 1982en Castellón

Jose Maria con 3 años menos que yo parecía más trabajado por la vida y la lucha. Esa lucha que nos ha unido tanto y que ha hecho que no hubiera ningún tipo de secretos (personal y/o político) entre ambos. Si, nos curtió aquella experiencia de Esquerra Independent de Castello, nos enseñó que sólo mientras la izquierda está unida se avanza y se conquistan derechos (luego queda la defensa de los mismos) Por fin EIC consiguió dos concejales en aquellas elecciones municipales del 79 lo que permitió que por fin Castellón tuviera un Alcalde Socialista (Tono Tirado). Pero nos ha unido tantas cosas (supongo que donde estés te reirás de lo que pasamos), como buscar trabajo, recorriendo fábricas y viendo que ninguno nos daba trabajos. La verdad ¿quién podía querer a unos rojos? Pero continuamos construyendo lo que sería EUPV; quizás el éxito más profundo fue el 25 de Abril celebrado en Castellón (quizás una de las manifestaciones más potentes vistas en la Ciudad.

Pero la ultraderecha desde el Aparato del Estado continuaba actuando. Asesinatos por parte del Batallón Vasco Español, o por parte de Guerrilleros de Cristo Rey. Asesinatos que continúan estando impugne y por los que no quiere acordare nadie…. La violencia fue increscendo hasta llegar al fatídico día del 23F. No nos lo pensamos y decidimos abandonar la ciudad, la verdad es que hicimos bien ya que entre otras cosas la ultraderecha (con pistola al cinto vino a buscarnos a cierta cafetería que había al comienzo de la Calle Mayor. Al día siguiente volvíamos, oficialmente nos decían que Tejero había fracasado. La realidad, sin embargo fue muy distinta. Comenzaba un retroceso en nuestras conquistas. Por poner un ejemplo a nivel de País Valenciano se llegaba a un Pacto mediante el cual se sustituía la “cuatribarrada, con el escudo del Consell” por la actual bandera de la Ciudad de Valencia y se aceptaba la vía del 143, cuando resulta que con el President Albiñana se luchaba por la vía del 151… Al mismo tiempo este reflujo supuso un debate en el seno de la izquierda, cierta parte de la misma se derechizaba hasta integrarse en la Unidad del Poble Valencia. Por tanto EIC dejó de existir como tal

Por aquella época decimos dar un paso e ingresar en el PCE. Allí llegamos a ocupar la Ejecutiva de la Plana Alta como Secretario General y Jose María como Secretario de Organización. Fueron momentos difíciles ya que el PCE caminaba hacia una crisis que conllevaría la ruptura del Partido. En aquellos años fui candidato a la Alcaldía de Castellón en las elecciones de 1983. El PCE perdió los dos concejales que tenía en el Ayuntamiento. Una parte del Partido (la mayoritaria, representada por Gerardo Iglesias pretendía construir una Alianza Amplia (lo que más tarde se convertiría en EU). Mientras que la parte minoritaria (representada por Carrillo) defendía las esencias clásicas del Partido. Esta tendencia en la que nos encontrábamos la militancia de Castellón terminaría montando el PT. Nuestra discusiones políticas continuaban y en aquellos momentos nos ayudaba un joven que ha terminado siendo un gran amigo (como lo es Francesc Colomer). Sin embargo aquella aventura terminaría por ayudarnos a tomar un decisión política (de la que no nos hemos arrepentido hasta el día de hoy)

                                                Candidatura a la Alcaldía de Castellón 1983

Por tanto en 1985 tomamos la decisión de “volver” al PSOE. No quisiera olvidar que en la década de los 70 Jose María se encontraba en Sevilla militando en las JJSS y yo por mi parte durante un par de años coincidí con las JJSS (1974-76) de Valencia. ¿Por qué volver al PSOE? Por que a pesar de sus bandazos (como marxistas creíamos y creo) el PSOE es el Partido de la izquierda y en los momentos de crisis siempre el Movimiento obrero y las clases populares “miran” hacia sus organizaciones de clase tradicionales. El PSOE representa la ideología de aquellos que dieron su vida y que lucharon por su clase coomo Pablo Iglesias, Luis Ariquistain, Indalecio Prieto, Largo Caballero, Julian Besteiro, Gómez Llorente y tantos otros.

Durante estos 36 años no hemos dejado de luchar por las ideas socialistas. 36 años en Izquierda Socialista pero siempre teniendo claro un objetivo: lo primero y fundamenta son las clase populares y su organización política y, por tanto IS nunca debía convertirse (para nosotros) en un “fin en si mismo” que pudiera servir para egoísmos personales que se convirtieran en “moneda de cambio” en determinadas negociaciones para conseguir cuotas de poder. Para nosotros, para mi, IS simplemente había de ser, debe de ser un instrumento que permita la batalla ideológica y que ayude a la formación de los socialistas. Lo primero y fundamental son nuestras siglas y lo que ello significa.

Esta ha sido nuestra línea, es la línea de la mayoría de los adscritos a IS. Por eso, desde la crisis de la Asamblea Federal de 2014 hemos estado en la legalidad del Partido, trabajando codo con codo con la Secretaria de Organización del Partido. Es sintomático que cuando se cambia de SO las normas cambian de la noche a la mañana y se vuelve a una situación anterior a 2014 donde no existía aquello de “un militante un voto”. Aparece de nuevo una democracia “delegada”….Por esto mismo y por coherencia nos negamos a participar. Si por coherencia. Si después de luchar por lo de “un militante un voto”, si después de 7 años de estar codo con codo con la Secretaria de Organización buscando una nueva estructura que defendía la democracia de base nos encontramos con un retroceso, es preferible “no legitimar” estos hechos. Quizás por esto mismo no nos extrañe lo que aparece en los Estatutos del 40 Congreso de este Partido centenario.

                                               Conferencia Polítca de IS 2018

ESTA HA SIDO NUESTRA LUCHA. Hoy me queda un largo camino, sin mi hermano pero su memoria nos hará no desfallecer


Y tu recorrerás de nuevo

las alamedas y las dunas de tu Ayamonte

te tomarás tus jumillas por Triana

buscando a tu amada


Carmen te recogerá por la mar

dando cobijo en el regazo

y marchareis abrazados

acaraciandoos y esperando el mañana




Javier Méndez-Vigo


viernes, 18 de junio de 2021

El Capitalismo en sus formas


 

El capitalismo, debido a que su motor es el incansable afán de lucro y su resultado la concentración de la riqueza, es el impulsor tanto del cambio climático como de la desigualdad global. Como observó Marx, tiende a destruir sus dos fuentes de riqueza, la naturaleza y los seres humanos. Ninguna reforma o regulación del capitalismo ha sido el resultado de una conferencia de ricos que decidieron actuar en base a sus conciencias. Todo cambio ha sido forzado desde abajo, por la revuelta popular y por el poder de la organización de la clase trabajadora. Muchos de los manifestantes que se han manifestado en contra del G7, y se han enfrentado a una persecución policial totalmente injustificada por hacerlo, entienden esto. El propósito de las protestas no es cambiar la mentalidad de los ricos, sino movilizar las fuerzas que puedan enfrentarse a ellos. Estos «líderes mundiales» no nos representan a nosotros ni a nuestros intereses. Todo el movimiento sindical debería tener claro eso a medida que la corte estadounidense se traslada esta semana de Cornualles a Bruselas, del G7 a la OTAN, es decir, de la economía de la supremacía de Washington a su aplicación por el poderío militar.

La electricidad, como bien común, tiene que dejar de estar de inmediato bajo el control de un oligopolio que, además de contaminar y destruir el territorio, nos chupa la sangre. El nuevo modelo debería ser uno que conjugue una empresa pública que garantice en todo momento el suministro, especialmente dando solución al futuro problema del almacenamiento, con toda una red de cooperativas comunitarias que produzcan de manera distribuida, cerca de donde se consume, y sobre todo, bajo propiedad de la comunidad. En lugar de destinar miles de millones a seguir subvencionando a empresas como Endesa, Iberdrola, Naturgy o Repsol, el gobierno debería emplear los fondos Next Generation en un plan que permita la autoproducción eléctrica en la mayoría de los hogares. Esta medida no sólo ayudaría a alcanzar la soberanía energética y desconectarnos del mercado, sino que además bajaría al territorio la movilización de la economía.

Debiera ponerse en marcha, como alternativa necesaria, la obligatoriedad de que todas las nuevas construcciones de viviendas y edificios en las ciudades de toda España contasen, desde el principio, con instalaciones fotovoltaicas, cuando menos para su propio autoconsumo; así como también un ambicioso plan de ayudas –tanto de tipo técnico como de financiación– para fomentar de forma decidida la instalación de esa tecnología en el parque de viviendas y edificios ya existente, asunto éste en el que España va muy retrasada en relación con otros países europeos. Y dar prioridad a los pequeños proyectos distribuidos y al autoconsumo en instalaciones agropecuarias (invernaderos, granjas, secaderos, etcétera). Esto permitiría el autoconsumo de la población, la incorporación a la red de la energía sobrante, mayor eficiencia energética y un considerable ahorro en transporte de energía y en la factura eléctrica de las familias.

La clase media ha saltado por los aires. Su declive es imparable y no hay vuelta atrás. Cualquier tiempo pasado fue mejor, aunque estuviera lejos de ser un paraíso. Solo le queda la nostalgia del empleo fijo, del puesto asegurado, que le permitía desarrollar un proyecto coherente de vida, antes de que el despido libre y la flexibilidad laboral, impusieran su ley. Pero algunos aún confían en el regreso de los buenos tiempos, igual que los judíos siguen esperando la llegada del Mesías. Desde el parado al desahuciado, pasando por el que a duras penas llega a fin de mes, o los trabajadores de bajo coste, de usar y tirar, todos, sea cuales sean sus circunstancias y situación, se sienten partes integrantes de la misma.  Lamentablemente, tienen mucha más conciencia de clase, y más claros sus intereses, los ricos que ellos. El Mercado como un dios caníbal, que se alimenta de carne humana, ha reemplazado al Estado de Bienestar. El capital le ha ganado la batalla en todos los frentes; la tecnología y la globalización han terminado de darle la puntilla; y la moribunda clase media continuará hundiéndose sin remedio en el pozo mientras no cambie el sálvese quien pueda por la lucha colectiva. Antes el capitalismo en sus formas solo nos queda “la lucha de clases”, en esta sociedad.

JMDR.

domingo, 2 de mayo de 2021

La Foto de Colón


De ahí que cabría hablar más de un auténtico plebiscito al plantear lo que se dirime en los debates de la Comunidad de Madrid. Y ello por lo que supuestamente está en juego. No estamos ante una alternativa a la vieja usanza del bipartidismo dinástico hegemónico, actitud que prevaleció en la política española hasta el estallido de la crisis financiera del 2008 y las consecuencias económico-sociales que la consiguiente Gran Recesión desató. Tampoco en la dinámica ideológica tradicional izquierda-derecha, o al menos no en sus connotaciones habituales. Ni siquiera en el vaivén arriba-abajo que puso de moda la nueva política tras la llegada de Podemos a las instituciones con su tesis del significante vacío. Lo que en teoría se ha ventilado  el 4M, en plena pandemia sanitaria y laboral, es un compendio condensado de todas esas variables vectoriales. La máxima expresión atronadora del doble antagonismo izquierda-derecha y arriba-abajo. Si hay que aceptar el veredicto del tumulto imperante, de lo que se trata es de elegir entre fascismo o democracia (o, en su envés, entre comunismo y libertad).

El planteamiento  sería el siguiente. El partido Vox, surgido en las elecciones andaluzas de 2018, supondría la encarnación de ese fascismo que la izquierda en el poder denuncia denodadamente. Un grupo euroescéptico de la derecha populista, de porte xenófobo, homófobo y trumpista, liderado por Santiago Abascal, antiguo concejal del Partido Popular (PP) en Euskadi. Colectivo ultra que se ha encaramado como tercera fuerza en el Congreso de los Diputados, por delante de Unidas Podemos (UP), a quien saca más de medio millón de votos y 17 escaños. El inquietante sorpasso de esta extremaderecha habría llegado a ser quien es gracias al apoyo determinante del PP, al que por otra parte Vox condiciona parlamentariamente en varios gobiernos regionales (Andalucía, Madrid o Murcia).

El trifachito constituido por PP, Cs y Vox, las tres derechas de la foto de Colón con su discurso del odio. Dos mundos distintos y distantes, separados por un abismo de incomprensión y desencuentros. Dos categorías existenciales irreconciliables, donde el adversario político pasa a ser considerado como el enemigo a batir y no el simple disidente. Esa es la radiografía sobre la que se escrutaran los resultados de las urnas el día de autos en la Villa y Corte. Conviene recordar para mayor abundancia y precisión que en los muchos años en que los de Génova 13 han ostentado el gobierno de la nación, en algunas ocasiones disponiendo de mayoría absoluta, nunca procedieron fascistamente, impidiendo su relevo en el poder del Estado cuando la izquierda les destronó electoralmente. Que los fundadores de Vox abandonaron el PP en protesta por la política blanda de Marino Rajoy. Que los hinchas de Abascal no comparten grupo en la euro cámara con los partidarios de Reconstrucción Nacional (RN) de Marine Le Pen y la Liga Norte (LN) de Mateo Salvini. Y que en la actual España democrática, partidos que muestran afinidad con la etapa franquista, como Falange o el propio Vox, son legales y plenamente constitucionales. Porque tanto el PSOE como el PCE, entonces claves en la oposición a la dictadura, así lo pactaron con los tardo franquistas (aceptando al Rey designado por Franco como jefe de Estado y de las Fuerzas Armadas; admitiendo el consenso con la UCD de Adolfo Suarez, el último secretario general del Movimiento Nacional, el partido único del franquismo; y vetando que los republicanos históricos pudieran concurrir a las primeras elecciones libres de 1977). Aquel blanqueamiento de los posfranquistas se llamó reconciliación nacional y forma ya parte de nuestra herencia recibida. Una versión humorística, pero no exenta de profundidad, la ha ofrecido Díaz Ayuso al proponer a Ángel Gabilondo que vote a su favor en la investidura si tanto desea levantar un cordón sanitario contra Vox. Incunable para las hemerotecas que el dirigente socialista toreó repitiendo el mantra “Ni Vox ni Ayuso. Ni la ultraderecha ni las políticas que blanquean a la ultraderecha”.

El día 4 de mayo de 2021, si la estampa de “Colón” sale reforzada el resto de las “Nacionalidades Ibéricas”, dirán  Madrid es Fascista, nada más alejado de la realidad que esta frase. Y siempre si sale quedara el dicho de Alfonso Guerra “El pueblo se ha equivocado” 

domingo, 28 de febrero de 2021

Esperpento


El maestro D. Ramón María del Valle-Inclán nos avisa de un nuevo esperpento español: “Un juez imputa por atentado a la autoridad al hombre que recibió una paliza en Linares por dos policías de paisano”. Encima de apaleado, a las mazmorras

`Del dictador a la monarquía cuando lo considere evidente´ todo atado y bien atado, la monarquía entre tricornios sale airosa como salió Franco, cuando Cabanellas tras la larga sangría dijo al dictador: “Señor jefe del Estado español, en nombre de la Junta de Defensa Nacional, os entrego los poderes absolutos del Estado” (a lo que responde) “Podéis estar orgullosos, recibisteis una España rota y me entregáis una España unida en un ideal unánime y grandioso. La victoria está de nuestro lado. Ponéis en mis manos a España y yo os aseguro que mi pulso no temblará”.

`Los miserables´ te darás cuenta; obra fundamental de Víctor Hugo ambientada durante los sucesos de la rebelión de junio de 1832: Jean Valjean, un ex-convicto al que se encierra durante veinte años por robar un pedazo de pan, se convierte en un hombre ejemplar que lucha contra la miseria y la injusticia, por el contrario el comisario Javert, que es un “profesional” fascista de la policía, lo persigue inflexible convencido de que tiene cuentas pendientes a saldar con la justicia: el enfrentamiento entre ambos se produce durante las revueltas de 1832, en París, en las barricadas un grupo de jóvenes idealistas plantan cara al ejército en defensa de la libertad. En la obra aparecen muchos miserables aunque haber, hay diferentes definiciones de la palabra miserable, me gusta la de Víctor Hugo, porque hay que ser francamente miserable para escoger una profesión para someter, asesinar y abollar conciencias ¿Acaso apalear al pueblo y recibir privilegios por ello, es una profesión? ¿Qué nombre tiene el profesional al que pagan por matar y apalear trabajadores en lucha por mejoras salariales y contra los despidos? ¿Son mercenarios miserables los que por profesión apaleador, ejercen la violencia contra el pueblo como el yanqui en Iraq, Siria, Afganistán… bombardeando calles indiscriminadamente, mercados, hospitales, centros de enseñanza y viviendas en barriadas de miseria?

El mundo está viendo que llueve, apalean como diluvio a chaparrones incontenibles de uniforme de guerra, y de camuflaje, como uno más dentro `como uno más de los mejores reventadores´, y, ellos, los medios, lo ven, pero repiten una y mil veces: NO!!! De tanto repetirlo los agradecimientos secretos entre bastidores crecen y rellenan entretelas mientras, la gente, que está viendo llover de verdad empieza a dudar creyendo tener cataratas, finalmente, consiguen que el débil de entendederas diga la aportación de los loros de la caja tonta, que no, que no llueve: ‘TODO DESPEJADO’. Y, zassss, una joven se queda sin ojo para toda la vida, huy, si llueve, y cómo llueve! La doctrina de Goebbels es utilizada hasta la saciedad por los gobiernos del mundo USA-democráticos, los más del mundo. El nazismo no desapareció nos lo aplican en dosis para no llamar mucho la atención, aunque a veces nos matan.

Que buena, sana y reconfortante es la vida del que trabaja en el camión de la basura respirando el hedor de la putrefacción, limpiando retretes en grandes estaciones de transporte o empresas de reciclaje del consumismo de la mierda desechable, de mineros bajo los túneles en las entrañas de la tierra o andamios carcomidos de la construcción a alturas de pánico o doblando el espinazo de sol a sol de bracero o temporero entre explotadores de explotaciones encubiertas de prostitución donde anida el ricachón.

Violencia son los bancos, los rescates y que no haya dinero para investigación en vacunas, o para que los trabajadores cobren una pensión decente. Violencia son palos en Vallecas y palmaditas en las espaldas en el barrio Salamanca. Violencia es que violen los derechos de los trabajadores de forma sistemática. Que se acuerden de la Constitución solo para reprimir, porque solo reconocen los Art. referentes a las amenazas y a la represión, y que la olviden para proteger la corrupción, para echar a las gentes de sus casas, para recortar en sanidad, en la educación o para desangrarnos a través del recibo de la luz y del teléfono…

Ante todo esto hoy más que nunca está vigente la “Lucha de Clases”

JMD

 

domingo, 17 de enero de 2021

Vacunas del covid-19


 

¿Cómo lograr vacunas para todos?

 Gobiernos favorables muestran nuevamente su mezquindad con planes para una vacunación nacional en 2021 muy inferior a la requerida. En España y Argentina, por ejemplo, con poblaciones superiores a los 40 millones de habitantes, los gobiernos planifican una campaña de 10 y 12 millones de vacunas, respectivamente. Además, esta vacunación insuficiente se realizará a lo largo de varios meses, con determinados criterios de prioridades. Millones de trabajadores y sectores populares quedarán afuera de esos planes y en “zona de riesgo”.

Una noticia reciente informa que los “países ricos”, con 14% de la población mundial, ya se han asegurado 51% de las vacunas que serán fabricadas el próximo año y que parte importante de la población mundial no tendrá acceso a ella. Mientras los países imperialistas “se cubren la espalda”, el resto del mundo “que se arregle como pueda”. Algunos, como vimos, harán campañas parciales de vacunación; otros, los más pobres, directamente quedarán afuera. Es una nueva y cruel muestra de que para el capitalismo la salud pública para los trabajadores y las masas es secundaria frente a los costos y las ganancias.

 Un gigantesco operativo mundial de vacunación es que, además de no hacerse con un plan internacional cooperativo sino con una feroz competencia entre empresas y gobiernos, el precio de las vacunas incluye los derechos de patente propios de considerar la salud pública como negocio y no como un derecho de primera necesidad de la humanidad, como es la alimentación, la educación, la vivienda…etc.

 Todo el proceso de fabricación y vacunación (la acción de la OMS y de los gobiernos) debe ser controlado y gestionado por las organizaciones de los trabajadores, en particular por representantes del sector de salud pública: médicos/as, enfermeros/as y especialistas en epidemiología. Es preciso avanzar más aún: para que haya vacunación para todos y para que la salud pública sea considerada como un derecho de la humanidad, es necesario expropiar y estatizar bajo control obrero todos los grandes conglomerados privados farmacéuticos que están inmersos en esta “carrera por la vacuna”. Son necesarios verdaderos planes de salud pública para el presente y para el futuro: no podemos descartar nuevas pandemias ni desconocer el hecho que hay otras enfermedades que son endémicas. Hay que exigir que ese criterio se aplique a todos los medicamentos y que se garantice el financiamiento y los fondos de inversión pública necesarios para ello. Es decir, lo opuesto de lo que hacen el capitalismo.

 Los negacionistas, que consideran la ciencia como una “conspiración secreta para dominar la humanidad”. Son los mismos que defienden que la Tierra es plana o, en su versión religiosa, el creacionismo (el mundo tal cual es hoy habría sido creado por un Ser Superior) y sostienen que eso es lo que debería enseñarse en las escuelas. Son los que hablan de un “virus comunista” creado artificialmente por China o utilizan argumentos tan absurdos como el que las vacunas (en especial la producida en este país) provocarían cambios en el ADN de la persona que la reciba. Es imposible hacer un debate serio con este sector porque sus ideas son irracionales y llevarían a la humanidad a retroceder siglos en su combate contra las enfermedades. El segundo es un sector de la clase obrera que, con razones fundadas, desconfía de todo lo que provenga del capitalismo. Son trabajadores que ven que las vacunas son un negocio y que las del coronavirus, en particular, serán aplicadas sin plena seguridad sobre sus efectos colaterales negativos. Entonces dicen: “nos quieren usar de conejillos de Indias” y rechazan la alternativa de vacunarse. Hay que exigir que las vacunas para todos con otras demandas: un seguimiento sanitario también gratuito de quienes las han recibido y, finalmente, que deben ser los gobiernos y las empresas productoras los que se hagan cargo de la atención de los efectos secundarios que puedan tener. Es una exigencia muy necesaria ya que, por ejemplo, tanto Pfizer como Astra Zeneca han solicitado “inmunidad” sobre la responsabilidad por los efectos colaterales negativos para entregar sus vacunas y varios gobiernos ya han aceptado esa condición. En el extremo de esta posición de defensa de los conglomerados privados farmacológicos se ubica el gobierno brasileño de Jair Bolsonaro, quien no solo se niega a impulsar la vacunación sino que además propone que quien se vacune firme una eximición de responsabilidad para las empresas fabricantes.

 Y estos intereses y necesidades son superiores a la libertad de elección individual y se imponen a ella si entran en contradicción. Porque si un trabajador se niega a vacunarse, esa es una decisión que no solo lo afecta a él sino también a sus compañeros de trabajo, a su familia y a sus vecinos porque es una fuente potencial de transmisión y contagio. Es necesaria la reivindicación de vacunas para todos, gratuita y obligatoria, con todas las consideraciones que hemos agregado. Llamamos a la clase trabajadora y el pueblo a luchar por ella; es nuestra  propia vida la que está en juego.